"El protocolo debe ser un guante a medida que se adapte a la situación de cada familia y su empresa"
Es un acuerdo que realiza la familia empresaria para ordenar la relación entre familia y empresa, de manera de preservar la sana convivencia entre ambos ámbitos. Es un proceso cuyo resultado más significativo es la acción de acordar.
Garantizar la unidad familiar, el compromiso de la familia empresaria con la continuidad de la empresa y la profesionalización tanto de la empresa y de la familia como de las personas, dentro de un marco de orden, responsabilidad y respeto por los valores familiares.
El protocolo debe ser un guante a medida que se adapte a la situación de cada familia y su empresa. Teniendo en cuenta esto, podemos sistematizar aquellas soluciones que abordan los temas comunes que se dan en todas las empresas familiares, para luego llegar a una propuesta personalizada segun las necesidades de la empresa, y el grado de complejidad que se presente tanto en la empresa como en la familia empresaria.
Abordamos la profesionalización teniendo en cuenta tres dimensiones: La familia, la empresa y la persona.
Qué hacemos
Acompañamos a las familias empresarias en su desarrollo y en el logro de su continuidad a lo largo de las distintas generaciones. Trabajamos teniendo en cuenta tres ámbitos o dimensiones: la familia, la empresa y las personas, ya que consideramos que la familia empresaria será exitosa si es capaz tanto de crear y distribuir riqueza, como de crear felicidad y por otra parte, lograr la autorrealización de sus miembros pensando su rol desde una manera holística en pos del desarrollo integral de cada persona.